Los bonos de carbono son un componente clave de los esfuerzos nacionales e internacionales para mitigar el incremento de las concentraciones de gases del efecto invernadero (GEI). Creados con el Protocolo de Kyoto en 1997, son un instrumento para que personas, empresas, gobiernos y particulares puedan financiar iniciativas que pretenden compensar su huella de carbono. Climatetrade es una de las empresas que está encabezando este movimiento.
La plataforma de Climatetrade está basada en blockchain que permite invertir en créditos de carbono de forma descentralizada, es decir, financiar proyectos sostenibles sin intermediarios y con total transparencia. Actúa como un “marketplace B2B de proyectos verdes”, un espacio donde las empresas se ponen en contacto con la plataforma para elegir en qué iniciativas ponen dinero. ¿Cómo funciona? Las organizaciones calculan las emisiones generadas en una o varias partes de su cadena de valor para posteriormente compensarlas con diversas iniciativas repartidas por todo el mundo. Proyectos que no solo se centran en las emisiones, sino también en otros aspectos vinculados a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU como la protección de ecosistemas naturales o la biodiversidad.
El valor diferenciador de la plataforma es la utilización de tecnología blockchain y su experiencia de usuario; sencilla y atractiva, conectando peer-to-peer a los desarrolladores de proyectos de mitigación con empresas y consumidores, eliminando, por primera vez la figura del broker.
Empresas como Correos o Meliá Hotels International ya han llegado a un acuerdo con la plataforma valenciana. En el caso de la empresa hotelera, con la Climatetrade sus clientes podrán compensar la huella de carbono intercambiando los puntos Meliá por créditos de CO2.