Los alumnos del CEIP Sant Bernat Calvó y la ciudad sostenible del S. XXI

El pasado 29 de mayo los alumnos de sexto de Primaria del CEIP Sant Bernat Calvó de Reus fueron invitados a desplazarse a la escuela Pi del Burgar, en la misma ciudad, para participar en el programa del Ayuntamiento «Aprenem junts» (Aprendemos juntos) del Plan Educativo del Entorno de la Ciudad.

Los alumnos realizaron un taller en el cual debían realizar dos maquetas; Una sobre una ciudad sostenible y otra sobre una ciudad no sostenible. Esta es una de las actividades que forman parte de un trabajo más amplio sobre el Cambio Climático y que se enmarcan dentro del Proyecto Europeo GET UP AND GOALS en el que participan de forma activa algunas escuelas de la ciudad.

En el proceso de diseño, los alumnos definieron toda una serie de ideas sobre el cambio climático: concepto de sostenibilidad, concepto de huella ecológica, necesidad de creación de zonas verdes, utilización de energías de origen renovable, entre otras.

Para la presentación de ambas maquetas, los alumnos realizan una dinámica de creación de escenas teatrales para explicar los conceptos al alumnado de primaria. La presentación teatralizada de las maquetas se realizó el 17 de Junio, con el apoyo de TBVT, en la Escuela Marià Fortuny.

Antes de comenzar, todos los asistentes fueron invitados a desayunar y, después de la exposición, tanto los niños como sus profesores recibieron una efusiva felicitación de parte de los representantes del Departament d’Educació de la Generalitat, que habían acudido para presenciar el acto. La experiencia ha sido valorada de forma muy positiva por todos.

El cambio climático y el hambre, ¿están relacionados?

El cambio climático es uno de los temas más debatidos de los últimos años, especialmente porque se ha asimilado y aceptado socialmente como un “problema real”. Las consecuencias del cambio climático quedan puestas en evidencia por datos como el aumento de la temperatura global en 2016 de 1,1 grados, la subida del nivel del mar o el progresivo deshielo de las masas glaciares como el Ártico.  

A menudo se tiende a pensar que el cambio climático tiene un efecto únicamente medioambiental. Sin embargo, hoy en día podemos observar cómo este problema ha generado claros impactos sociales y económicos. Según datos del Programa Mundial de Alimentos, ya son más de 1.000 millones las personas aquejadas por el hambre en el mundo, y el cambio climático amenaza con disparar el número de personas en riesgo de padecer hambre y desnutrición. Según las previsiones, los fenómenos meteorológicos extremos y las sequías serán cada vez más frecuentes y de mayor magnitud. El destrozó de tierras aptas para la agricultura por la elevación del nivel del mar, cambios en los regímenes de las precipitaciones que menguará las cosechas o la escasez cada vez mayor de recursos son solo algunas de las consecuencias del cambio climático que afectarán directamente a la nutrición y hambre mundial.

El cambio climático es un problema mundial que está directamente relacionado con el hambre. A vista de los efectos, millones de personas se enfrentarán al riesgo de padecer hambre y desnutrición. La mayoría de las personas afectadas serán habitantes de los países más pobres donde el hambre, la desnutrición y la inseguridad alimentaria ya constituyen un problema generalizado. Según datos del Programa Mundial de Alimentos, para el año 2020, el rendimiento de los cultivos de secano de algunos países podría descender hasta el 50%. A pesar de que los efectos afectarán a todo el mundo, las consecuencias en regiones como el África subsahariana tendrá un impacto especialmente fuerte, ya que no tienen los recursos y capacidades para adaptarse y resolver las dificultades.

El cambio climático es una realidad y sus efectos serán inevitables, sin embargo, aún podemos minimizar sus consecuencias. Son muchas las iniciativas que trabajan para impulsar soluciones que consigan frenar el cambio climático, apostando por un sistema energético y 100% renovable basado en el ahorro y la eficiencia, así como para tratar de reducir en la mayor medida las emisiones mundiales. Cada vez hay una mayor conciencia social sobre la importancia de alcanzar un modelo basado en energías limpias y que sea respetuoso con el medio ambiente.